Ya dije en una ocasión que yo era un cultivo delicadísimo. Todo lo que me beneficia esta frío. Sin todas las condiciones que me resultan beneficiosas, más aún, exultantes, me vuelvo algo plenamente absurdo.
He llegado a una conclusión:
Cuando tu inteligencia no juega a tu favor, juega totalmente en contra.
Cuando tu inteligencia no juega a tu favor, juega totalmente en contra.
***
No hay comentarios:
Publicar un comentario